- El procurador del Grupo Parlamentario Socialista, Javier Campos, ha defendido una propuesta ante las Cortes de Castilla y León para evitar la concurrencia de ganaderos infractores en el uso y disfrute de los pastos, con independencia de la modalidad de adquisición de derecho.
El Grupo Parlamentario Socialista en las Cortes de Castilla y León ha presentado una propuesta ante la Comisión de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural para instar a la Junta a modificar las normativas referentes al uso de los pastos, con el fin de evitar la concurrencia de ganaderos infractores recurrentes en el uso y disfrute de los mismos, con independencia de la modalidad de adquisición del derecho. Asimismo, los socialistas han solicitado a la administración autonómica incrementar el control sobre el ganado perteneciente a los infractores recurrentes que disfrutan del uso de los pastos en la zona de la montaña oriental leonesa.
“Se trata de uno de los principales problemas que acucian a los ganaderos de la montaña oriental leonesa”, explica el procurador Javier Campos, “el cual está generando verdaderos conflictos”. La iniciativa “redunda en la mejora de la seguridad” de los pastos, vías, municipios y poblaciones en los que no tiene que estar el ganado, “evitando problemas sanitarios, derivados de la presencia de animales sin ningún tipo de control, que pueden transmitir cualquier infección”.
La propuesta trata de evitar también “problemas de convivencia por conflictos que se generan entre vecinos de distintas comunidades autónomas”, ya que la montaña oriental leonesa es una zona que, por su situación geográfica, resulta idónea para aceptar ganado de otras comunidades limítrofes. En los últimos tiempos, se han presentado multitud de quejas y se han producido situaciones desagradables debido a la actitud incívica de ganaderos que no atienden adecuadamente a los animales que pastan en territorio leonés. Algunos de ellos, a pesar de incumplir con las normas de uso adecuado de los pastos, se presentan a las nuevas campañas de licitación, con independencia de las infracciones acumuladas, sin que la ley ni las ordenanzas a cumplir puedan hacer nada para aplicar penalizaciones.
“Es una pena que el Gobierno Autonómico no haya querido atender nuestra petición”, concluye Campos, “nuevamente, la montaña oriental leonesa queda al margen de las políticas de la Junta”.