- La proposición, aprobada en el Senado sin votos en contra, insta al Gobierno a mantener los requisitos exigidos en la actualidad y adoptar otros que supongan una mejora de las condiciones laborales de los funcionarios, permitiendo una mayor conciliación familiar.
El senador leonés Salvador Vidal Varela ha defendido esta mañana en la Cámara Alta una moción en nombre del Grupo Parlamentario Socialista para revisar y actualizar la normativa sobre permutas entre empleados públicos, proposición que ha formado parte del debate en la Comisión de Función Pública del Senado. Tal y como ha explicado el propio senador en su intervención, “la permuta representa un supuesto de movilidad del personal funcionario de carrera, que permite el intercambio de puestos de trabajo similares entre dos Administraciones distintas”.
La normativa básica que regula la permuta es preconstitucional y data de hace décadas, por lo que actualmente se está trabajando en una nueva Ley de Función Pública de la Administración del Estado, con inclusión de un capítulo específico dedicado a las formas de provisión de puestos de trabajo y supuestos de movilidad. “Es el momento idóneo para esta moción y proponer desde esta comisión la inclusión de la figura de la permuta, así como una actualización de sus requisitos para responder a las situaciones y problemáticas a las que se enfrenta la Administración General del Estado en la actualidad”, ha manifestado Salvador Vidal durante su defensa.
“Tenemos dos normas preconstitucionales: una del año 1952, que tiene 70 años, tantos como el reinado de Isabel II en Inglaterra, y otra del 64”, ha expuesto el senador, “además son normas reglamentarias pero no son ley formal, emanada del Parlamento. Ante esta obsolescencia y la nueva realidad que suponen las diecisiete comunidades autónomas y la autonomía local, se hace necesario y urgente una revisión y, en su caso, una actualización de la normativa”. Vidal Varela ha señalado la importancia de apostar por una nueva norma “más clara” y “no discriminatoria”, que “resuelva problemas de conciliación laboral y familiar” entre los empleados públicos.
La moción socialista, aprobada sin votos en contra, ha contado con el apoyo de todos los partidos políticos salvo el PNV, que se abstuvo.